lunes, 8 de septiembre de 2014

Ucrania, Rusia, España y EEUU

        Últimamente la propaganda prorusa en España es tremenda y tiene una explicación. Desde que tengo uso de razón en España existe un sentimiento antiamericano que tira para atrás, apesta. Creo que tiene que ver con la incultura, la ignorancia y la envidia. Este sentimiento antiamericano provoca que desde hace unos cuarenta años (que yo sepa, pero serán más...) los españoles sean prorusos a pesar de que no saben porqué lo son.

Desde el derribo del avión de pasajeros de Malaysia Airlines (MH17) con un misil la campaña prorusa en España es aún más férrea si cabe.
La explicación es bastante fácil. Imaginemos que ese avión lo hubiesen derribado los ucranianos ¿No se habría demostrado ya con pruebas fehacientes? Ha pasado tiempo de sobra para que Putin y su equipo de investigación (tan potente e infalible como se le supone gratuitamente en latinoamerica y España) hubiesen sacado ya la información y las pruebas que incriminasen a los ucranianos, dejando como complatemente inocentes a los prorusos "ucranianos" y a los propios rusos.
Por otro lado vimos como los prorusos con las cajas negras del avión derribado en su poder, negaban el paso a los miembros de la OSCE para que huciesen una investigación sobre el suceso. Bajo mi punto de vista está claro quien derribó el avión, pero... quien tenga la competencia y las pruebas para demostrarlo, que lo haga.

Hoy he leído en un periódico proruso (o más bien proPutin) que un analista americano afirma que si Ucrania entra a formar parte de la OTAN se creará una guerra nuclear sin precedentes e inevitable.
Otra afirmación del analista es que la historia dejará escrito que ese suceso será responsabilidad de EEUU, que tendrán los americanos las manos manchadas de sangre.

Es sabido que hay muchos americanos antiamericanos, ya lo vimos en la guerra de Vietnam. Pasa como en España, hay un buenismo gratuito que se pone siempre a favor de los rusos o de la propia URSS, ese bloque tan benevolente regido por el comunismo que ha eliminado al menos 110 millones de personas inocentes. Estos antiamericanos ven con buenos ojos que la URSS quisiera invadir Afganistán (no así que los EEUU fuesen a la guerra con Vietnam), y ven con buenos ojos que el régimen comunista se cargase a sus propios ciudadanos solo por ser poseedores de conocimiento y tener una carrera universitaria, a médicos, a ingenieros... se presentaba el NKVD en sus casas y los metían en el GULAG con todos los demás presos de diversas nacionalidades, o directamente los fusilaban. También ven con buenos ojos que Stalin matase de hambre a cinco millones de ucranianos en un año por no querer regalarle la totalidad de sus tierras. Stalin no tenía bastante con el 90% de las cosechas.

¿Saben qué les digo? Hay mucha gente que dice que hay que leer mucho para saber más y analizar los conflictos con más base. Yo tengo la total convicción de que los antiamericanos que conozco (unos ignorantes y otros menos) no cambiarían ni una coma de lo que opinan al respecto por muchos libros que leyesen. Su sectarismo es mucho más cegador que cualquier escrito o religión.

Un saludo a la gente de bien.




Foto: Reproducción de miembros del NKVD atacando a un ciudadano.
 Fuente de la foto: http://proucomunisme.blogspot.com.es/

1 comentario:

  1. El antiamericanismo de los españoles es un sentimiento antiguo, de la Guerra de Cuba, que la izquierda se ha encargado de avivar.
    Lo de Ucrania es otra cosa. No soy procomunista; pero, en este caso, estoy del lado de Putin. Lo estoy por que el buenismo de la UE no es tal; con la de Ucrania ya son tres las guerras que ha promovido.
    Tras la primera, la de los Balcanes hubo un acuerdo para mantener las zonas de influencia rusa y europea en los límites de entonces. Rusia lo ha cumplido pero no la UE, que, si Putin no le para los pies, parece decidida a extender su zona de influencia hasta las islas Kuriles.
    No hay que olvidar que la UE reconoció un gobierno golpista en Ucrania por que era favorable a sus intereses. Eso no parece muy democrático.

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